Cortar, lijar, pulir, decapar, devastar… Los discos de corte tienen incontables aplicaciones. Aunque muchos de estos productos están diseñados pensando en su uso industrial, cada vez son más habituales dentro del bricolaje moderno. El inmenso catálogo de modelos existentes en el mercado y su amplio rango de precios hace que la compra de un disco de corte sea una decisión complicada.
A la hora de invertir en un nuevo disco de corte, debemos asegurarnos de que el modelo que estamos adquiriendo está diseñado específicamente para el tipo de uso y el trabajo que vamos a realizar. Si usamos un disco de corte sobre superficies distintas a las indicadas por el fabricante podemos encontrarnos con grandes dificultades para trabajar y acabados de mala calidad, además de desgastar o romper nuestro nuevo disco.
Consideraciones básicas sobre los discos de corte
Entre los factores a tener en cuenta a la hora de elegir un disco de corte están el diámetro de la amoladora o radial -los más habituales son 115, 125, 180 y 230 mm-, el diámetro interior del disco -normalmente, 22 o 23 mm-, la capacidad máxima de trabajo, el material a cortar y el tipo de uso que vamos a darles. Cuanto más sofisticado sea el trabajo a realizar, un disco de corte de mayor calidad puede suponernos una inversión mucho más rentable.
Los discos de corte universales obtienen buenos resultados con los materiales de construcción más habituales, pero para materiales delicados, como el mármol o el porcelánico, precisamos un disco de corte específico para ese trabajo. También podemos diferenciar entre discos de corte duros, como los de óxido de aluminio o carburo de silicio; o blandos, recubiertos de materiales abrasivos que se desprenden con el uso.
Atendiendo al material con el que están fabricados, los discos de corte más habituales son los de metal, widia o el conocido disco de diamante. Los discos de metal son productos abrasivos empleados para el corte y devastado de todo tipo de metales. Fabricados a base de carbono, carborundum o corindón, este disco de corte destaca por su versatilidad, pudiendo usarse tanto con radiales grandes como pequeñas. Los discos de widia, con base de acero y widia en las puntas de los dientes, se emplean normalmente para cortar madera.
Disco de diamante: tipología y principales aplicaciones
Los discos de diamante están fabricados en acero, con partículas de diamante en su diámetro externo. Este tipo de disco de corte permite cortar materiales de gran dureza, como la cerámica o el hormigón, con una alta velocidad y precisión. El rango de precios de un disco de diamante es muy amplio en función de factores como el modelo, calidad, cantidad y concentración del diamante, tipo de soldadura, etc.
El disco de diamante de corte en seco es el más habitual para trabajar con amoladoras. En este caso, puede emplearse agua para mejorar su refrigeración y conseguir una mayor limpieza en el corte.
Disco de diamante de corte en húmedo permite obtener resultados mucho más precisos y no genera polvo, si bien nunca puede utilizarse para trabajos en seco.
Disco de diamante puede clasificarse como continuo, segmentado o turbo. Los discos continuos son aquellos en los que las partículas de diamante se distribuyen por todo el borde exterior. Destacan por su precisión, aunque su velocidad de corte es menor. Están indicados para trabajar con materiales delicados, como los porcelanatos esmaltados. En el caso de los discos segmentados, encontramos segmentos de diamantes separados por espacios para aumentar la refrigeración.
Disco de diamante segmentado obtiene mejores rendimientos con mayor velocidad de corte, aunque el acabado es menos limpio comparado con los discos continuos.
Por último, los discos turbo se caracterizan por sus bandas almenadas. Este tipo de disco de diamante representa una buena opción intermedia entre los excelentes acabados de los discos continuos y el rendimiento y durabilidad de los segmentados.
Las recomendaciones de los expertos
Elegir entre el extenso catálogo de discos de corte disponibles en el mercado puede resultar una ardua tarea, con un amplio rango de precios. Si no estás seguro de tu elección, solicita asesoramiento profesional en tu ferretería habitual o tienda de ferretería online sobre el tipo de disco más adecuado al trabajo que quieres realizar.